
Hoy ha sido un día de maravilla, nunca pensé que nuestro reencuentro sería de lo mejor que me ha pasado este año; cuando te ví me costó reconocerte, siempre te recordé con cara de niño de 13 años que todavía iba detrás de una pelota de futbol de vez en cuando, ahora te ves alto, deportista como siempre y aún caballero. Aunque me contaste sobre tu propósito de la venida, hablando podimos llegar a un acuerdo hermoso, como mejores amigos por siempre. Fuimos a ver nuestras antiguas casas en el barrio donde crecimos, fuimos a nuestro punto de encuentro donde jugabamos horas y horas, caminamos, hablamos, reimos y sonreimos. Nunca olvidaré todos los bellos momentos que pasamos juntos, aprendi a quererte de una bonita forma que es la amistad, y espero que el tiempo siga manteniendola perfecta como hasta ahora. Te pedí perdón por que hubo un tiempo que traté de olvidarte porque me sentía herida, pero tu me diste algo más bonito que nadie lo ha hecho, protegerme como tu amiga y amarme como tu novia... En este momento somos grandes amigos, mañana seguiré aprovechando que volviste por un pequeño tiempo y estaré eternamente agradecida por desear volver a verme...
Te amo mucho amigo ♥